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Grandes posibilidades en el etiquetado del vino

Imprimir una etiqueta de vino: algunas ideas

A día de hoy existen muchísimas bodegas que se dedican a elaborar sus propios vinos. Empresas que pueden tener cada una, una oferta mínima de tres o cuatro referencias, o hasta más de 50, si hablamos de grandes grupos de bodegas. Ello hace que este sector sea uno de los más saturados del mercado, donde vender un vino, se convierte en toda una aventura en la que cada pequeño detalle del producto cuente, incluyendo algo tan diminuto como la sensación que provoca la etiqueta de un vino al tocarla, debido a un uso creativo de los acabados o de la impresión.

Debido a la enorme cantidad de marcas de vino que existen, el papel del diseño de la etiqueta o diseño de packaging adquiere un lugar fundamental. Dependiendo de la historia que cuente el vino a través de su nombre y el diseño de su etiqueta, el consumidor podrá escogerlo, o por el contrario, ignorarlo porque no le llame la atención.

Sin embargo, esta situación del sector del vino no es para nada ninguna desventaja, todo lo contrario, provoca que el mundo del vino sea muy interesante a la hora de trabajar la creatividad de una etiqueta. ¿Por qué? Muy sencillo: la etiqueta de una botella de vino será la primera toma de contacto entre el consumidor y la marca, y las impresiones que provoque la misma, serán las que se quedarán marcadas en su memoria.

¿Cómo podemos conseguir que nuestra etiqueta sea atractiva en un primer golpe de vista? Existen muchas técnicas, acabados, materiales y selecciones de tintas que van a conseguir ese elemento diferenciador en el “packaging” que buscamos. Dicho de otra forma, gracias a las diferentes opciones de impresión de etiquetas podemos conseguir un efecto sorpresa que haga que el consumidor desee el producto y lo ame.

Mejores acabados de impresión para una etiqueta de vino

Si estás buscando opciones para imprimir la etiqueta de tu vino, somos lo que buscas. En ETIMAISA somos empresa especialista en la impresión de etiquetas para vino, y para ello, hemos llegado a utilizar muchas variedades de acabados y opciones de impresión. Aquí te contamos, algunos de los acabados más usuales que se utilizan en etiquetas de vino:

  • Barniz UVI: gracias a su textura con brillo, se pueden ensalzar diferentes elementos de la etiqueta. Ello permite jugar mucho con el diseño, destacando por ejemplo, la palabra “Gourmet” o “Premium” de la etiqueta del vino.
  • Barniz 3D: aporta una experiencia sensorial donde el tacto es el protagonista. Una técnica de acabado además muy versátil, que permite jugar con diferentes tipos de brillos y grosores. Se utiliza para darle un toque de “lujo moderno” a la etiqueta y transmitir que ese vino ha sido creado y desarrollado con toda variedad de detalles.
  • Stamping: se trata de un acabado que aporta un relieve muy suave y que se puede aplicar con efectos metalizados. Este acabado es muy frecuente en cajas de bombones, o productos de alimentación que quieren transmitir lujo. En vino también se utiliza, para contar que se trata de un vino de altísima calidad y prestigio.
  • Golpe seco: un acabado sutil pero que transmite cómo la bodega y el diseño de la etiqueta han sido creados con sumo cuidado y detalle.

Sin duda, estos son algunos de los acabados más frecuentes en el diseño e impresión de etiquetas de vino. Sin embargo, lo bonito del sector del vino es que se pueden imprimir muchos otros tipos de acabados. Gracias a todas las combinaciones de técnicas, texturas, tintas y colores que pueden surgir durante el proceso de impresión de la etiqueta de vino, se pueden crear diseños increíbles que dejarán al público con la boca abierta.

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